Cada año, Eramet celebra en todos sus sitios alrededor del mundo el Día Mundial de la Seguridad (DMS). Este año, el evento evoluciona para convertirse en el Día Mundial de la Seguridad y la Salud (DMSS), dos prioridades fundamentales de nuestra hoja de ruta de RSE «Act for Positive Mining».

Para esta edición 2025, Eramet centra sus acciones de concientización en dos temas complementarios: las rutinas de gestión de la seguridad y la gestión de la fatiga.

Seguridad y salud: dos desafíos estrechamente vinculados

Eramet dedica gran parte de sus esfuerzos a la prevención de accidentes, pero también a factores menos visibles, como la fatiga.

La fatiga representa un riesgo importante, especialmente en nuestros sitios mineros e industriales, donde las actividades a veces se realizan en condiciones difíciles: falta de oxígeno en altitudes elevadas en Argentina que afecta la calidad del sueño, altas temperaturas nocturnas que dificultan el descanso en África, Asia u Oceanía, y horarios desfasados.

De hecho, la fatiga impacta directamente la vigilancia, la coordinación, el tiempo de reacción y la toma de decisiones, y puede ser la causa de situaciones peligrosas – en particular durante la conducción de maquinaria, el trabajo en altura, el uso de equipos pesados o la gestión de sistemas complejos. Al degradar el rendimiento físico e intelectual, aumenta el riesgo de errores humanos y, en consecuencia, de accidentes.

Por eso, esta edición 2025 marca un punto de inflexión: integrar la salud a nuestro Día Mundial de la Seguridad refleja nuestra voluntad de promover una cultura integral de prevención.

Rutinas para romper la rutina

Las rutinas de gestión de la seguridad forman parte de las operaciones diarias en nuestros sitios y son el corazón de nuestra estrategia de prevención.

Se trata de una serie de acciones y prácticas regulares destinadas a garantizar un entorno de trabajo seguro y una excelencia operativa sostenible.

Para la DMSS 2025, el Grupo eligió destacar tres rutinas clave que involucran tanto a empleados como a contratistas:

  • Animación Visual del Desempeño (AVD), un análisis previo de las tareas clave para identificar riesgos y adaptar medidas de protección y prevención antes de cualquier intervención.
  • Interacciones de Seguridad, intercambios regulares en el terreno para observar, escuchar, reforzar los buenos comportamientos y corregir los comportamientos de riesgo.
  • Verificación de los Controles Críticos de las actividades de alto riesgo, que permite asegurarse de que las medidas y condiciones de seguridad se hayan tomado, comprendido e implementado correctamente en el terreno para operar con tranquilidad.

Estas acciones recurrentes, lejos de ser simples procedimientos obligatorios o «rutinarios», constituyen en realidad un conjunto de prácticas integradas a la cultura de seguridad del Grupo, al servicio de un objetivo común: «cero accidentes» y «cero lesiones».

La tecnología al servicio de la lucha contra la fatiga

La fatiga representa un desafío importante en la vida profesional diaria dentro de una empresa minera: puede impactar tanto el rendimiento como la seguridad, dentro y fuera del sitio.

Actualmente, varios dispositivos de gestión de la fatiga se utilizan en algunos de nuestros sitios. Por ejemplo, la herramienta OSPAT, que permite evaluar el nivel de vigilancia de los trabajadores antes de comenzar su turno; o los sistemas de cámaras de detección de fatiga instalados en vehículos pesados para alertar en tiempo real a nuestros colaboradores.

El objetivo de estas herramientas es doble: responsabilizar a los colaboradores sobre su estado físico y permitir a los gerentes adaptar, si es necesario, la organización del trabajo para garantizar la seguridad de todos.